La longitud del recorrido puede ser de 100 a 200 metros y según la categoría de las pruebas comprenderá entre 12 y 20 obstáculos, de los cuales al menos 7 serán saltos.
El recorrido es secreto hasta el inicio de la prueba, momento en que el Juez coloca tanto los obstáculos como los números que marcan el orden en que estos deben salvarse, además de especificar el tiempo que otorga para realizar la prueba.
Dentro de la práctica del Agility hay tres categorías, que dependen fundamentalmente del tamaño de nuestro perro, ya que la altura de los obstáculos no puede ser la misma para uno pequeño que para uno grande. Por ello, se divide en SMALL, para perros que miden hasta 35 cms. a la cruz. Aquí podemos ver un ejemplo de pista para este tamaño. Hay que considerar que un salto sobre vallas agrupadas tendrá una separación máxima entre ellas de 30 cms. para esta categoría.
Luego tenemos la categoría MEDIUM, con perros que miden de 35 a 43 cms. a la cruz. En este caso, un salto sobre vallas agrupadas tendrá una separación máxima entre ellas de 40 cms.
Por último, está la categoría LARGE, para perros que miden 43 cms. o más a la cruz. El salto sobre vallas agrupadas para esta categoría tendrá una separación máxima entre ellas de 55 cms.
DEL TRAZADO DEL RECORRIDO
Un trazado bien concebido debe permitir al perro evolucionar con soltura y sin tropiezos, ya que la finalidad consiste en buscar el equilibrio entre el control del perro para evitar fallas sobre los obstáculos y la velocidad de ejecución del recorrido.
El juez revisará el recorrido y medirá con precisión su longitud, tomado en cuenta, por ejemplo, que las combinaciones de saltos (tres vallas como máximo) contarán como un solo obstáculo y distarán entre 4,50 y 7 metros estando formado únicamente por vallas. La distancia entre dos obstáculos consecutivos podrá oscilar entre 5 y 7 metros.
