martes, julio 31, 2007

PARA EL PERRO EL AGILITY ES COMO EL MATRIMONIO...

Esta fue una de las tantas frases célebres que nos dejó de recuerdo Marcelo Bruzzone durante su visita a nuestro país. ¿Qué quería decir con ella? Poco a poco vamos a ir desentrañando este y otros misterios.
Para todos aquellos que tomaron el Seminario, con seguridad el agility será uno antes de este fin de semana y otro muy distinto a partir de ahora. Marcelo, con su gran generosidad, nos llevó hacia una nueva visión de nuestro querido deporte, con sencillez, con simpatía y sobre todo, con el conocimiento que le da su experiencia de años en el agility.
Aquí está la mesa de los jóvenes... aunque parece que hay un colado. El Seminario partió con las indicaciones para escoger a un buen cachorro para hacer agility, como hacer ejercicios con él, como trabajar las zonas de contacto y las vallas. El manejo del tiempo de entrenamiento y otros.

Luego Marcelo nos dijo que el pilar fundamental del Agility son los jueces, que deben ser corredores y tener conocimientos actualizados, los cuales se obtienen a través de las guías que entrega la FCI y que Marcelo nos dejó.

También se le hicieron preguntas acerca de distintas técnicas a aplicar en los recorridos, las que explicó brevemente ya que todas serían practicadas durante el Seminario.

Partimos con los cachorros y un sencillo ejercicio para enseñarle a moverse en las vallas, los que practicó con un Shetland de 3 meses (Inti, el más pajarón, resultó ser el más listo).

Posterior a eso, Marcelo dispuso algunos obstáculos en la pista para comenzar a practicar pre giros, pibot y cruces. Todos los participantes pasaron con sus perros "a la antigua" y luego con las técnicas que Marcelo enseñaba a cada uno. Se trabajó con las dificultades particulares de cada caso y la diferencia se notó.

Aquí yace Nicolás Rubio, víctima del cambio de mano.

Con "la marroncita" Diana se trabajaron especialmente las zonas de contacto.
A Patito Bahamondes lo hicieron correr a punto del infarto.
Tal vez una de las cosas más extraordinarias que todos aprendimos es que nuestros perros tienen la habilidad de interpretar los movimientos de nuestro cuerpo, por lo cual se hizo mucho incapié en la posición de este.

También Marcelo trabajó con todos nuestros perros, demostrándonos que no eran necesarias muchas de las cosas que sabíamos y que podíamos facilitarnos mucho el trabajo con técnicas sencillas y fáciles de aplicar.

Entre otros temas, se habló de la importancia de acostumbrar al perro a la caja de transporte y de considerar seriamente la diferencia entre el perro-mascota y el perro-deportista.








¡¿Y POR QUÉ EL AGILITY ES COMO EL MATRIMONIO?! Porque de acuerdo con las palabras de Marcelo, "El perro comenzó a hacer agility y se jodió, ¿Viste? El agility es algo que queremos hacer nosotros y no necesariamente el perro, por lo que para él debe convertirse en un motivo de mucha entretención".

Maridos: Ya lo saben, ¡Proporciónennos entretención y mucha joda!

Lo que continúa no es aplicable al matrimonio, a excepción del último punto.

Si el perro se orina, defeca o se escapa, es porque no hemos logrado entusiasmarlo o atraer lo suficiente su atención. Esto se trabajó con varios perros, como la escapista Kimba, a la cual Marcelo indicó ¡Más joda!

Aquí está el antes y el después de Francisco Rodríguez...









¡Yo también aprendí cosas nuevas!

Máximo aplicando lo aprendido: front cross, pibot, pre giros, etc....


SOCIALES
Un buen pisco sour era lo mínimo que merecía nuestro amigo después de tanto trabajo. El sábado en la noche, la comida se realizó en el Club Militar.
¿Pero ustedes creen que Marcelo descansó? Noo......
Ni siquiera a la hora de almuerzo lo dejamos respirar.
Final del Seminario y entrega de diplomas.

El grupo en pleno.

Será hasta la próxima. Muchas gracias Marcelo Bruzzone. Esperamos que te lleves un grato recuerdo de tus amigos chilenos y que nos volvamos a encontrar en un futuro muy cercano.

Agility Press.